No todos los días se tiene la oportunidad de probar un teléfono que es récord Guinness, pero tuve esa suerte con el LG Optimus 2X, que fue honrado como el primer móvil del mundo con un chip de doble núcleo (ya había equipos con dos chips, pero no es lo mismo), y que se anunció en diciembre último.
En la Argentina le ganó de mano en el mercado el Motorola Atrix, que saldrá a la venta a fin de este mes, mientras que LG espera ofrecer en el mercado local el 2X, tentativamente, en septiembre próximo. Ambos tienen un chip de doble núcleo Tegra 2 de Nvidia, que en teoría le permite tener, grosso modo, casi el doble de rendimiento que un procesador de un solo núcleo.
Los que esperan que abrir el navegador o mandar un SMS sea notoriamente más rápido que con un smartphone con un chip de un solo núcleo a 1 GHz saldrán algo decepcionados. Sí está claro que el Optimus 2X corre cualquier aplicación de Android sin que se le mueva un pelo y, lo que es mejor, podrá hacerlo con las futuras versiones que aprovechen su doble cerebro.
Hoy el equipo muestra que LG, finalmente, está dispuesta a competir en el disputado terreno de los móviles Android de alta gama.
El Optimus 2X tiene una pantalla táctil capacitiva de 4", resolución de 800 x 480 pixeles y tecnología IPS (que usa también el iPhone). El resultado es excelente, con muy buena visibilidad y colores sólidos; de lo mejor que he visto últimamente. El frente del equipo no tiene botones físicos, sino una zona con los cuatro botones de control de Android como zonas sensibles al tacto, algo que HTC ha implementado con éxito en sus móviles.
Cuenta con apenas tres teclas: la de encendido y las de volumen. En la base del equipo están los parlantes (de buen sonido) y la conexión USB; arriba, el conector para los auriculares y la salida HDMI, que permite mostrar en una pantalla compatible videos de calidad Full HD como los que puede capturar su más que decente cámara de 8 megapixeles. Aquí sí se nota el poder del procesador. La tapa de la batería está cubierta de un material que evita que se resbale de la mano, algo bueno, porque no es un equipo pequeño, pero tampoco de los más grandes.
El móvil corre un Android 2.2 con algunas modificaciones impuestas por LG, similares a las que Samsung implementó en su línea Galaxy (cuatro accesos directos siempre visibles, y la activación del Wi-Fi, Bluetooth, GPS, volumen y rotación de la pantalla en el menú desplegable de notificaciones), que no molestan, pero tampoco son particularmente novedosas.
Habrá que ver qué precio le pone LG al Optimus 2X en la Argentina, pero más allá de eso, es un dispositivo que puede luchar de igual a igual con los titanes que se disputarán la cima del mercado móvil en 2011.
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